Reflexiones de FRIDA sobre lo que hemos aprendido internamente — FRIDA

Los resultados de la evaluación externa han suscitado muchas ideas, reflexiones y dudas nuevas, y también han confirmado muchos conceptos y procesos que ya nos habíamos cuestionado. En esta sección, estamos hilvanando nuestras respuestas a los hallazgos de la evaluación externa, así como la reflexión interna. Muchos de los comentarios, historias y experiencias que hemos recibido han iluminado el impacto que los recursos inspiran para la conexión entre y dentro de los movimientos; han activado nuestra imaginación y nos han ayudado a prever todas las posibilidades que podrían surgir de una práctica de subvención participativa.

FRIDA se mantiene dedicada a dotar de recursos a los futuros feministas participativos que queremos ver desarrollarse. Aunque llevará tiempo que esos futuros se manifiesten, ya podemos sentir su impacto en la resistencia de las conexiones de los movimientos.

Índice

Abordar la estructura detrás del proceso
Cómo abordar la accesibilidad del modelo
Abordar la complejidad de la conexión del movimiento
Aprendizaje del movimiento, conexión y alineación
Reflexiones y retos internos
Las posibilidades y visión de futuro de este modelo

Abordar la estructura detrás del proceso

Facilitación de las necesidades de participación

FRIDA financia la organización de jóvenes feministas que es multilingüe, intertemática, interconectada dentro de diferentes movimientos y abundante en estrategias y enfoques. Aunque les jóvenes organizadores feministas de todo el mundo pueden enfrentarse a realidades y retos similares en su organización, los movimientos feministas jóvenes no son homogéneos¹ . Crear un proceso participativo de concesión de subvenciones que pueda responder a las múltiples dimensiones de la organización feminista a nivel global ha sido mucho más desafiante para nosotras que centrarnos en un contexto temático o geográfico específico. El modelo de FRIDA está explorando diferentes enfoques de participación a través de contextos sociopolíticos, áreas de enfoque y barreras lingüísticas para las más de 500 propuestas postulantes que terminan en el proceso de votación durante cada ciclo. En cada ciclo de subvenciones, adaptamos y cambiamos el modelo en cada una de las regiones de enfoque de FRIDA para abordar sus desafíos específicos. Debemos trazar explícitamente la infraestructura interna que sostiene este proceso participativo para facilitar la conexión y el intercambio del movimiento feminista joven y abordar las complejidades con transparencia y cuidado. También es importante que el conocimiento que se comparte en el modelo de subvenciones participativas nunca se quede solamente en el ámbito de la concesión de subvenciones, sino que esté en constante diálogo con todas las demás partes del trabajo de FRIDA.

Estrategia de financiación participativa

El liderazgo de les jóvenes feministas ha sido clave en la creación de estrategias alineadas con las necesidades de los movimientos feministas jóvenes globales y sus siempre cambiantes realidades¹. La mayoría de los procesos de FRIDA -especialmente nuestro trabajo programático y las decisiones de financiación, la estrategia y los criterios- están abiertos a la orientación, los comentarios y las aportaciones de la comunidad de jóvenes feministas. Sin embargo, somos conscientes de que cuando los donantes solicitan la participación de la comunidad en sus procesos de toma de decisiones, esto puede añadir trabajo extra a les organizadores que a menudo ya están sobrecargados de trabajo. Para compensar esto, creamos nuestras estrategias de financiación conjuntamente con los movimientos, de modo que incluso cuando la participación en los procesos de los donantes es demasiado abrumadora, sus necesidades siguen estando integradas en nuestro proceso y en la toma de decisiones final. Las estrategias de financiación que se generan a través de la participación de la comunidad, como ésta, pueden tardar en desarrollarse, pero nos permiten ahorrar tiempo cuando las ponemos en práctica.

Una estrategia creada a través de un proceso participativo también siembra y cultiva la confianza en el proceso de toma de decisiones de FRIDA, especialmente cuando no es posible la participación directa en las decisiones finales. Todas las decisiones requieren un ritmo diferente, por lo que la confianza y el debate previo sobre la estrategia nos ayudan a ahorrar tiempo y a tomar decisiones más rápidamente. Por ejemplo, debido a que hemos cocreado las estrategias regionales y de concesión de subvenciones por adelantado con jóvenes organizadores feministas, cuando llega el momento de nuestro proceso anual de renovación de subvenciones, la participación de las colectivas coparte en la toma de decisiones es opcional. En este caso, las decisiones las toma el personal del programa de FRIDA con les integrantes interesades del Comité Asesor de cada región, y se guían por estrategias y marcos de financiación que ya han recibido los aportes de la comunidad² .

La estrategia de FRIDA para apoyar holísticamente a los movimientos feministas jóvenes debe crearse siempre con:

Aportes y recomendaciones del Comité Asesor Global de FRIDA
Aportaciones y recomendaciones del personal de FRIDA
Datos recogidos en cada convocatoria: proceso de votación y opiniones generales
Datos recogidos de los comentarios de las colectivas coparte: encuestas e informes
Estrategias de financiación temáticas y regionales

En el caso de las oportunidades de subvención de FRIDA que tienen una financiación limitada, debemos asegurarnos de que existe un proceso participativo de toma de decisiones, además del desarrollo participativo de nuestra estrategia de financiación. Seguimos este proceso para las Subvenciones Especiales de FRIDA, por ejemplo, que se dedican a apoyar el fortalecimiento de capacidades, la colaboración y la conexión del movimiento entre colectivas coparte y los asesores, y para las que sólo tenemos un número limitado de subvenciones disponibles. En este caso, creamos un comité de revisión entre pares para las Subvenciones Especiales , dicho comité está formado por personal de los programas, colectivas coparte y asesores de cada región que no han solicitado una subvención especial. Todos los miembros del comité de revisión entre pares de las Subvenciones Especiales hacen aportaciones a la toma de decisiones, el personal aporta conocimientos adicionales sobre cada uno de los grupos y las necesidades de fortalecimiento de capacidad que compartían. Este comité de revisión entre pares toma las decisiones finales basándose en los criterios que se establecen con los movimientos antes del proceso de selección. Esto aumenta la transparencia de nuestros procesos internos de concesión de subvenciones.

Por otro lado, el proceso participativo de toma de decisiones en nuestra convocatoria abierta, da la bienvenida a los aprendizajes obtenidos de muches jóvenes feministas a través de geografías, estrategias de organización y resistencia, y contextos complejos.

FRIDA se asegura de que cada nueva reflexión crítica, impacto y necesidad encuentre su camino en nuestra política de financiación, en la estrategia regional y en los criterios de financiación, así como en nuestros planes de mayor alcance. De esta manera, el personal de FRIDA junto con el Comité Asesor Global tienen la oportunidad de aprender con los movimientos, y asegurar que el conocimiento fluya a través de los diferentes procesos organizativos. Esta es sólo una de las razones por las que seguimos comprometides con un modelo participativo de concesión de subvenciones, en el que las decisiones clave son tomadas por la comunidad de jóvenes feministas que solicitan financiación a FRIDA.

FRIDA necesita desarrollar una herramienta para examinar cuándo se necesita una toma de decisiones abierta a la comunidad, y cuándo la consulta y las recomendaciones previas son suficientes para evitar sobrecargar a la comunidad de jóvenes feministas con un proceso de toma de decisiones. También debemos tener claro cuándo las decisiones deben ser tomadas específicamente por les integrantes de la Junta, el personal y el Comité Asesor de FRIDA.

Deberían existir diferentes opciones para la participación de la comunidad feminista joven en el proceso. Los datos muestran que a les jóvenes feministas sí les importan las decisiones finales, aunque no siempre tengan la capacidad de participar, por lo que podríamos fomentar un mayor compromiso abriendo más posibilidades de cómo participar.

No es necesario encuestar todo– FRIDA construye anualmente una biblioteca de conocimientos de les jóvenes feministas que permite realizar análisis de contexto temáticos y geográficos más profundos y un trabajo de estrategia enfocado. Por lo tanto, FRIDA es responsable de los datos que recibe de las comunidades de jóvenes feministas, y debe incorporarlos continuamente en sus procesos de toma de decisiones.

Además, FRIDA debe desarrollar una herramienta que ayude a guiar la cocreación de la estrategia de financiación participativa y apoyar otros procesos participativos.

El papel del Comité Asesor Global de Jóvenes Feministas

El primer³ Comité Asesor Global fue creado por activistas feministas que ayudaron a co-crear FRIDA y a poner en marcha sus etapas iniciales de trabajo. Este primer Comité Asesor Global tuvo muchas responsabilidades de estructura interna y gobernanza en un momento en el que FRIDA tenía pocos miembros de personal y ninguna estructura de Junta Directiva. Les asesores han sido un motor para FRIDA y han descentralizado los procesos de toma de decisiones de FRIDA y la infraestructura del Fondo desde sus etapas de incubación.

A medida que les asesores iniciales han ido dejando de pertenecer a FRIDA, les siguientes integrantes del Comité Asesor Mundial de Jóvenes Feministas⁴ han sido seleccionades mediante un proceso de convocatoria abierta para cada región. En la actualidad se sigue practicando un proceso de reclutamiento similar. Les asesores en transición, además de les integrantes del personal, toman las decisiones de reclutamiento de asesores basándose en las necesidades de asesoramiento y concesión de subvenciones de FRIDA. Este proceso no está abierto a la participación de la comunidad, a diferencia de la selección de los miembros del Consejo de FRIDA, que está abierta a las nominaciones y a un proceso de votación de la comunidad. Es importante reconocer que a lo largo de la historia del Comité Asesor feminista joven de FRIDA, les asesores recientes no siempre han podido adoptar inmediatamente la apropiación y el poder compartido sobre los procesos de FRIDA. Cuando un financiador forma parte de las decisiones sobre quiénes se unen a su Comité Asesor, se crea una dinámica de poder que podría limitar el sentimiento de propiedad que experimentan les recientes asesores. Pueden experimentar esta limitación en el Comité Asesor de FRIDA, especialmente cuando todavía están en el proceso de orientación sobre la interconexión de su papel con otros aspectos del trabajo de FRIDA. Les recientes asesores en cada una de las regiones suelen hacer crecer su agencia colectiva con el tiempo en relación con el personal y la Junta de FRIDA. La nueva estructura administrativa de FRIDA, que ahora incluye una Junta, también ha cambiado el papel del Comité Asesor, aunque siguen siendo una parte fundamental de la estructura de gobernanza de FRIDA.

Ahora, hay un equipo de personal en FRIDA que facilita la integración, representación y participación de les asesores en todos los procesos de FRIDA. La gobernanza de las jóvenes feministas a través del Comité Asesor Global descentraliza el poder y el intercambio de conocimientos dentro de FRIDA y construye un mecanismo de responsabilidad cruzada entre los movimientos feministas jóvenes y FRIDA como financiadora.

Les jóvenes activistas feministas del Comité Asesor Global aportan su experiencia sobre las necesidades y prioridades de la organización de les jóvenes feministas en su contexto sociopolítico regional. Esto orienta las estrategias de financiación regional de FRIDA, ayuda a determinar los criterios de financiación y la planificación de la difusión, y aumenta la accesibilidad del proceso participativo de concesión de subvenciones de FRIDA. A diferencia de la Junta Directiva de FRIDA, el Comité Asesor Global forma parte de los procesos de concesión de subvenciones de revisión por pares en todo el trabajo programático de FRIDA. En el proceso de convocatoria abierta de solicitudes, participan en paneles regionales de revisión entre pares, que revisan la elegibilidad de les postulantes, se unen al proceso de votación de la comunidad y apoyan la coherencia y la equidad en el proceso participativo de concesión de subvenciones de FRIDA.

FRIDA debe reconocer la dinámica de poder en el comité asesor, que surge cuando les asesores más recientes se seleccionan a través de una convocatoria abierta en la que las decisiones son tomadas por otres asesores y el personal. Deberíamos considerar otros mecanismos de selección que permitan la participación de la comunidad en el proceso de selección de asesores.

FRIDA necesita invertir más tiempo y recursos en apoyar a la Comunidad Asesora para que se apropie de los procesos de FRIDA. Esto descentralizará el poder y distribuirá mejor la responsabilidad en toda la organización.

Las colectivas coparte como parte del panel de revisión
entre pares en los procesos de concesión de subvenciones

Antes del ciclo de subvenciones de 2020, sólo les integrantes del Comité Asesor Global formaban parte del Panel de Revisión entre Pares en el proceso de convocatoria abierta de FRIDA. Sin embargo, en los dos últimos ciclos de subvenciones, hemos puesto a prueba un panel en el que les integrantes del Comité Asesor Global se reúnen con activistas de las organizaciones sociales beneficiarias de FRIDA para revisar las propuestas y los resultados de la votación de los solicitantes. Después de recibir una subvención a través del proceso de votación de jóvenes feministas de FRIDA, muchas colectivas coparte han expresado su interés en seguir participando en el proceso de selección de nuevas colectivas coparte. Para muchas socias beneficiarias, la oportunidad de unirse a un proceso participativo de otorgamiento de subsidios para una nueva cohorte de beneficiarias les permite conectarse más y aprender de las jóvenes organizadoras feministas de su región. Muchas colectivas coparte, han compartido que cuando participan en los procesos de financiación, experimentan una mayor sensación de poder e importancia.

La participación de las colectivas coparte en el Panel de Revisión entre Pares también contribuye a la descentralización del conocimiento y la experiencia, y ayuda a construir el poder colectiva de les jóvenes feministas en el proceso de concesión de subvenciones de FRIDA. También fortalece la responsabilidad mutua entre el Comité Asesor, la comunidad de copartes y el personal, y aumenta la representación de les jóvenes feministas en la gobernanza de FRIDA, lo que mejora aún más la transparencia y la equidad del proceso.

Esto ha aportado más riqueza, matices y nuevas perspectivas al espacio del Panel de Revisión entre Pares. Sin embargo, es importante señalar que la participación de las colectivas coparte junto con los miembros del Comité Asesor Global en el Panel de Revisión entre Pares se ha puesto a prueba sólo en los dos últimos ciclos. Queríamos experimentar este modelo, y las posibilidades y retos que podía aportar antes de convertirlo en una parte estructural de nuestros procesos. Sin embargo, hemos descubierto que este espacio compartido para la toma de decisiones ha añadido nuevas capas de facilitación para FRIDA, así como una oportunidad para que FRIDA construya confianza y poder con los movimientos feministas jóvenes.

FRIDA puede revisar las posibilidades de ampliar el Panel de Revisión entre Pares y puede rediseñar el modelo para ajustarlo a todos los cambios que la comunidad ha expresado que necesita, incluyendo una participación más multidimensional.

FRIDA puede dar cabida a una mayor participación de las colectivas coparte en el proceso de revisión entre pares, así como en el proceso de divulgación, y garantizar que las colectivas coparte sean compensadas por su participación.

Por qué la convocatoria abierta de postulaciones incluye a más
responsables de toma de decisión que solo al grupo de expertes.

El Panel de Revisión entre Pares ha desempeñado durante mucho tiempo un papel central en el apoyo a FRIDA para navegar por los contextos sociopolíticos de sus regiones de enfoque y abordar las brechas y los problemas de acceso en nuestros sistemas y estrategias de financiación. Revisan más de 1.000 propuestas en cada ciclo para determinar si los grupos se ajustan a los criterios de financiación de FRIDA, y también evalúan los resultados de las votaciones para garantizar que haya coherencia en todo el proceso. Sin embargo, a la hora de tomar la decisión final, se priorizan las voces de les jóvenes feministas que han solicitado subvenciones⁵ . La mayoría de los procesos filantrópicos de concesión de subvenciones participativas incluyen un comité de revisión entre pares de la comunidad a la que apoyan, que generalmente toma las decisiones finales sobre el conjunto de postulaciones. Hay varias formas de diseñar este proceso con sólo un panel de revisión entre pares, y FRIDA aplica este modelo en algunas de sus subvenciones especiales. Sin embargo, teniendo en cuenta lo amplio y diverso que es el enfoque de financiación de FRIDA, el hecho de que un panel de revisión entre pares tome todas las decisiones finales de concesión de subvenciones no potenciaría necesariamente un proceso de concesión de subvenciones participativo e interseccional. Estamos colectivamente de acuerdo en que no podemos representar todas las voces, orígenes, identidades y enfoques organizativos en todos los contextos en los que FRIDA financia. Por lo tanto, incluimos a les postulantes de subvenciones en nuestra toma de decisiones final.

Incluso cuando los procesos de concesión de subvenciones son participativos, pueden reproducir las mismas desigualdades sistémicas y dinámicas de poder de cualquier otro proceso de concesión de subvenciones. Por ejemplo, prestamos mucha atención a la forma en que reclutamos a los miembros del panel de revisión entre pares. En el caso de muchos paneles de revisión entre pares, el personal está involucrado en el proceso de reclutamiento, lo que puede limitar el poder de les panelistas para abogar por diferentes prácticas radicales de financiación. FRIDA ha creado mecanismos para limitar esta dinámica de poder en su propio Panel de Revisión entre Pares y para alinearse con nuestros valores participativos. Esto ayuda a crear el actual modelo de concesión de subvenciones participativo de varios niveles de FRIDA, que permite a FRIDA tener espacio para compartir el poder entre múltiples participantes de la toma de decisiones y establecer la responsabilidad como marco para el crecimiento de las conexiones. Por ejemplo, cada persona del Panel de Revisión entre Pares, al revisar las solicitudes, puede aplicar diferentes criterios que se basan en su conocimiento, acceso y experiencia vivida.

FRIDA también ha co-creado una herramienta guía⁶ que nos ayuda a alinear el proceso de revisión con nuestros principios y valores. Esto a veces nos pide que dediquemos más tiempo a desaprender patrones y transformarlos en nuevos sistemas generativos para evaluar y establecer nuestros criterios y prioridades de financiación. La herramienta de orientación también ayuda a identificar a las organizaciones infrarrepresentadas, a los grupos con poco o ningún acceso a la financiación en sus contextos, a los grupos que probablemente no sean votados por motivos de idioma u otras dinámicas, etc. El Panel de Revisión entre Pares también revisa las votaciones finales para identificar cualquier dinámica de movimiento, sesgo o incoherencia que pueda haber ocurrido en el proceso, y puede apoyar el proceso de decisión final, que se basa en una votación de la comunidad.

FRIDA necesita aumentar la transparencia sobre el Panel de Revisión entre Pares y presentar al Panel de Revisión entre Pares antes de que el Panel revise las solicitudes presentadas, para que les postulantes sepan quién está revisando y si se ajustan a los criterios de FRIDA
⁷ .

FRIDA debe ser más clara en cuanto a las funciones que desempeña el Panel de Revisión entre Pares y cómo el proceso de votación colectiva influye en las decisiones finales.

El proceso no se hace a puerta cerrada

El hecho de contar con un panel de revisión entre pares y un proceso de votación de les postulantes hace que la toma de decisiones participativa de FRIDA sea más diversa y compleja. Sin embargo, la creación de un espacio para la retroalimentación, las aportaciones y las recomendaciones continuas ayuda a FRIDA a hacer el sistema más accesible, interseccional y verdaderamente participativo. Todos los grupos pueden ver los resúmenes de las propuestas que se están revisando junto a las suyas en su grupo de votación. Hay muchas emociones, realidades íntimas y vulnerabilidades escritas en las solicitudes de subvención que los grupos presentan a los financiadores, y a veces éstos se encuentran con nada más que una respuesta automática por correo electrónico o un proceso despersonalizado.

A menudo los procesos de postulación no son claros, y les solicitantes no saben quién ve y revisa su solicitud, si se aplican todos los criterios y cómo puntúan los donantes su importancia y necesidad de financiación. Como una de las principales herramientas de transparencia de su modelo participativo de concesión de subvenciones, FRIDA ha diseñado un sistema en el que los grupos pueden hacer un seguimiento de su propuesta, de la fase en la que se encuentran en el proceso y de lo que está por venir. Queremos que los grupos puedan ser testigos de las partes clave del proceso y que vean que el tiempo y los recursos que dedican a presentar su solicitud se valoran tanto como su trabajo, independientemente de que reciban o no financiación. Como financiadores, debemos comprometernos a crear confianza con los movimientos a los que apoyamos, independientemente de que formen parte de nuestras cohortes de copartes. Las oportunidades de crear relaciones y confianza son importantes en nuestra fase inicial de solicitud de subvenciones. Un proceso impersonal de concesión de subvenciones podría restar ese potencial.

El modelo participativo de concesión de subvenciones aumenta la transparencia, pero FRIDA también necesita seguir equilibrando esa transparencia con la seguridad y la confidencialidad en sus próximos ciclos de subvenciones.

Cómo facilitamos el acceso al panel de revisión entre
pares y el "conflicto de intereses

FRIDA ensures that there is clarity and transparency about the participation of our Board, Advisory Committee, and any participants that hold power within FRIDA throughout its grantmaking process. We have learned that 'conflict of interest'⁸ guidelines for our participatory grantmaking process are important for creating transparency and accountability toward young feminist movements. Our ‘conflict of interest’ policy guides us through potential dynamics of power and access and how they might play out in FRIDA's participatory grantmaking process. For example, it is critical that activists and organizers are part of boards, advisory committees or peer review panels where they can influence and transform grantmaking processes to ensure movement needs are truly represented. However, we must be mindful that this puts some organizers in privileged positions over others, and that this can create further challenges when the same movement and funder representatives hold multiple positions and hats across peer review panels, boards and advisory committees. This not only limits the diversity of perspectives, experiences and backgrounds that influence these spaces, but could emphasize individual visibility over movement needs and representation.

Since FRIDA's advisors are also recruited through an open call selection process, we have learned that the dynamics between Peer Review Panel members can also be affected by individual access, identity, language barriers and lived experience. Even when there is community participation in Advisory, Board and Peer Review panels, there are often conditions and power dynamics that influence how members see their voice having power or not. For this reason, the purpose of the structure behind FRIDA's participatory grantmaking process is to hold clarity about the roles, values, and principles we want to reflect in our decision-making process and how increased access might impact power-sharing. Still, we also need to ensure that there is mindful facilitation that ensures equitable participation within the Peer Review Panel. We use varied tools to facilitate conversations and understand what dynamics might affect equitable participation, as well as to offer different formats for expressing thoughts and sharing input and recommendations ⁹. We acknowledge that experiences with young feminist organizing make the participants in FRIDA's grantmaking process peers, and that there can be many connection points and similarities in our experiences, especially related to identity or geopolitical context. However, peer does not mean sameness, since our lives are shaped by the socio-political conditions, identities and bodies we inhabit, as well as how interlocking systems of oppression relate to them.

We hold these complexities collectively within both the Peer Review Panel and staff, who supports cross-communication and alignment of values throughout FRIDA's grantmaking process. Thus, FRIDA's 'conflict of interest' policy exists to help young feminists across FRIDA's governance structure to participate in its processes with greater awareness of boundaries and the power that we hold. For instance, the Advisory Committee has more direct access to FRIDA and is able to share support about a group or influence a group’s application process if there is a personal conflict or misalignment. The young feminist collectives that apply, on the other hand, don't have the same access to FRIDA. This is not something specific to participatory grantmaking, but is a concern that has grown from experiences with traditional philanthropy. It has proven to be an even greater concern when grantmaking decisions depend on relationships with a single Program Officer or are made behind closed doors. For many organizations, this experience is common when they apply for a grant from local offices of international funds or for government funding that might be biased, or decided based on relationship dynamics or even corrupted systems.

This hasn’t happened often among FRIDA's Peer Review Panel. Because we know this might be a possibility, however, we created a process where multiple Peer Review Panel members review the same applications, and where staff members review each Panel’s decisions for consistency and ask any clarifying questions. This ensures that no single advisor or staff member can necessarily sway the final decision. Advisors also declare 'conflict of interest' in some scenarios. For example: FRIDA advisory members can apply for a grant with their collective in the open call for proposals. When they do, they cannot participate in the review process with the Peer Review Panel, but can participate in community voting with other applicants, and with the same access to information as other collectives. To receive a grant, the entire community needs to vote for them, so there is a clear process where the Peer Review Panel can't decide alone to award a grant to an advisor’s group. If that group is selected to receive a grant, they also go through the same due diligence process as other groups, although this part of the process may be more straightforward for them because FRIDA is already familiar with the advisor and their work. Grantee partners take part in FRIDA's Advisory Committee, so if an advisor's collective receives a grant, they can remain on the Advisory Committee. However, there are agreements about the processes grantees can participate in—for instance, they can’t join a grant renewal process since under current agreements, that process involves just staff and non-grantee Advisory Committee members.

Board members, however, cannot apply or receive a grant from FRIDA. If an activist from a grantee partner collective is nominated and joins the FRIDA Board, they would need to step down from the grantee collective or the collective transition out of FRIDA's current grantee community. We made this agreement because they would join the Board as an individual activist and not as a grantee collective nominated by the grantee community to represent them. This means their collective would no longer be a peer to other grantee partners in terms of power, visibility, and access within FRIDA. Especially in the FRIDA renewal grant process, this would make it hard for that group to receive radical trust and to remain as a peer partner of the grantee community. This agreement is about recognizing power in all its forms and how it can direct our hearts and minds. This is why addressing access and intersectionality across lines of power and privilege is important.

We also apply this to FRIDA staff. Many staff members have been part of applicant groups or grantee partner groups in the past. Even though our lived experiences have ass young feminist organizers have been essential in shaping FRIDA's funding work to better support young feminist movements, many staff members have needed to transition from their collectives and step back from participating in FRIDA's process when collectives they used to work with are involved.

FRIDA should make the 'conflict of interest' policy more transparent to young feminist community members. FRIDA needs to ensure that this process is clear for the groups applying, advisory members and board members, as well as how we navigate important values within the grantmaking process and how applicants can share any inconsistencies they notice.

Cómo abordar la accesibilidad del modelo

Anonimato

En la fase de votación, les postulantes pueden leer resúmenes anónimos de otras solicitudes en su contexto geográfico y temático. En ocasiones, les solicitantes han pedido la oportunidad de saber más sobre las colectivas feministas homólogas de sus grupos de votación, conectar con elles y visitar sus páginas en las redes sociales antes de votar. Sin embargo, anonimizamos intencionadamente los resúmenes para minimizar cualquier no alineación, sesgo o preocupación de seguridad que puedan tener las colectivas. Esto también proporciona una capa de seguridad adicional para los grupos cuya organización podría ponerlos en riesgo, sin dejarlos fuera de las oportunidades de conectar y aprender de otras colectivas feministas. También animamos a los grupos a que se pongan en contacto con FRIDA en caso de que tengan alguna preocupación acerca de la seguridad, y nos aseguramos de que haya condiciones para que puedan participar.

Muchos de los grupos que se presentan son de reciente creación y es posible que aún no tengan materiales para presentar, mientras que otros pueden tener una fuerte presencia en línea que representa bien su trabajo. El acceso a la información puede influir en el proceso de votación y toma de decisiones, y poner en desventaja a algunos grupos, como los que tienen menos materiales publicados, lo que constituye otra razón para anonimizar. Sin embargo, puede haber formas de añadir más información para guiar a los grupos en su proceso de votación sin poner a les postulantes en riesgo o en desventaja.

FRIDA debería diseñar formas de compartir más información sobre los grupos y los contextos en los que operan sin ponerlos en riesgo. Esto podría apoyar la toma de decisiones de les postulantes durante el proceso de votación.

FRIDA puede explorar la posibilidad de ofrecer más formación a quienes participen en nuestro proceso participativo y compartir directrices de voto más completas para quienes estén interesades o necesiten más información.

FRIDA debería compartir los resúmenes de las estrategias regionales, clarificar sobre a quién hemos apoyado hasta ahora y dónde hemos identificado brechas con los grupos de votación. Aunque esto está disponible en nuestra página web, puede ser necesario que sea más accesible para apoyar las decisiones de voto si les postulantes encuentran difícil votar sólo por 5 grupos.

¿Por qué sólo solicitudes escritas?

Para apoyar el anonimato de nuestro proceso, FRIDA sólo acepta propuestas en formato escrito. Los grupos sólo pueden presentar sus solicitudes a través de una plataforma en línea en 1 de los 7 idiomas o presentar un documento de Word. Estamos de acuerdo en que otros formatos podrían abrir un espacio para una conexión más creativa entre los participantes, sin embargo, también hemos sido testigos de que la consistencia en el formato de las solicitudes neutraliza el proceso de votación y disminuye el sesgo. Además, no todos los grupos se sienten cómodos con los formatos de vídeo o podrían estar expuestos a riesgos si se comparten vídeos o fotos.

Asimismo, los formatos de vídeo, aunque sean más atractivos, podrían afectar al proceso de votación de aquelles que tienen más acceso a la tecnología, o que tienen fuertes habilidades de presentación de vídeo y de lenguaje, frente a les que no tienen el mismo acceso. No sólo podría afectar a les que eligen la escritura como herramienta de expresión, sino que también podría llevar a decisiones de voto basadas en la preferencia de presentación, en lugar de en el trabajo de organización en sí. El sesgo ya está presente en el formato escrito, ya que les solicitantes pueden votar en función de la elocuencia con la que los grupos presentan sus ideas por escrito, por lo que somos reacies a añadir más oportunidades para que el sesgo afecte al proceso. Y lo que es más importante, cuando las solicitudes están en formato escrito, la identidad de las personas que están detrás del trabajo es confidencial, lo que minimiza su exposición al riesgo. Hay aún muchos retos de accesibilidad que los grupos pueden experimentar en los procesos de concesión de subvenciones de los donantes en general, sin importar el formato: la accesibilidad de la solicitud, los requisitos lingüísticos, la jerga de la cultura no lucrativa, etc.

Abordando estos desafíos en el proceso de FRIDA, reconocemos que muches podrían experimentar estas barreras con nosotres también. Sin embargo, hasta ahora el formato escrito ha ofrecido la mayor equidad para nuestro proceso participativo global, inter temático y multilingüe.

El formato de postulación escrita nos permite practicar la coherencia y la equidad en un proceso participativo que involucra a más de 500 colectivas jóvenes feministas en cada ciclo. Sin embargo, FRIDA puede explorar formas más creativas de apoyar la presentación de propuestas escritas y proponer directrices más detalladas.

Acceso a las lenguas

Reconocemos que un proceso de postulación en sólo siete idiomas sigue siendo una desventaja para muchas colectivas feministas jóvenes. Por ejemplo, en muchas regiones traducimos las propuestas para que los otros grupos que las revisan puedan leerlas, lo que significa que los grupos no siempre tienen una visión totalmente precisa de los demás. FRIDA ha estado explorando formas de ampliar el acceso al idioma de los formularios de postulación y proporcionar apoyo adicional a los grupos que tienen dificultades para presentar sus solicitudes debido al idioma. Por ejemplo, FRIDA ha proporcionado información sobre la postulación en idiomas que hablan les asesores y el personal. Sin embargo, otro posible reto que no ha aparecido en las conclusiones es que el idioma puede ser una barrera para que los grupos lean las propuestas de les demás, o puede hacer que sea una tarea fácil para algunes y excesiva para otres, dependiendo de los idiomas de los contextos regionales de les postulantes.

Algunas colectivas de jóvenes feministas necesitan pedir apoyo a su comunidad para redactar y traducir su solicitud para poder postularse y formar parte del proceso participativo de FRIDA. El acceso al idioma también es un reto en los comités de revisión entre pares, y puede aumentar la dinámica de poder entre quienes toman las decisiones. Abordamos el acceso al idioma cuando creamos grupos de votación. Por ejemplo, clasificamos a los grupos que tienen habilidades de escritura o enfoques similares en el mismo grupo de votación para garantizar una mayor equidad lingüística.

Muches han compartido que el proceso de votación de FRIDA ha sido una importante oportunidad para aprender a presentar su trabajo, por lo que nos corresponde a nosotres, como financiadores, mejorar nuestra diversidad lingüística para apoyar su participación.

FRIDA ya está preguntando a los grupos en el formulario de postulación si han recibido apoyo de traducción para presentar la solicitud, y lo tiene en cuenta más adelante en el proceso. FRIDA también debería ampliar las posibilidades de apoyar a los grupos en su solicitud cuando no hablen una de las lenguas de postulación actuales de FRIDA.

Las directrices de votación que compartimos con todes les postulantes en el proceso de votación pueden recordarles que algunos grupos pueden encontrar difícil expresar su trabajo en una de las lenguas de postulación. Estas directrices deben recordar a los grupos que no deben votar basándose en la elocuencia del lenguaje, sino en las ideas y el trabajo que les gustaría apoyar.

Oportunidades y limitaciones de la participación en línea

Tanto el panel de revisión entre pares como las partes de votación de les postulantes del proceso participativo de concesión de subvenciones de FRIDA tienen lugar en un espacio en línea.

Hemos aprendido que la tecnología puede ayudar y facilitar conexiones que aún se sienten cercanas y tangibles. Hay aspectos emocionales de conexión y participación que les involucrades intercambian, y los grupos se sienten parte de un movimiento feminista más amplio.

La ventaja de albergar este proceso en línea es la diversidad de perspectivas, identidades y orígenes que pueden conectarse entre sí, lo que no sería posible para FRIDA en un ámbito físico. Sin embargo, tenemos que asegurarnos de que nuestro proceso participativo en línea aplique los mismos principios, valores y acuerdos feministas que practicaríamos en un espacio físico compartido, especialmente en lo que respecta a la atención holística y el bienestar. Utilizamos una plataforma en línea que permite al panel de revisión entre pares acceder a la formación sobre el modelo participativo de concesión de subvenciones, intercambiar comentarios y aprendizajes entre sí y documentar su trabajo. La votación de les postulantes también se realiza en la misma plataforma en línea, a través de la cual pueden crear su perfil, guardar y enviar su postulación y seguir el recorrido de la misma.

Sabemos que se produce un cierto nivel de toma de decisiones en persona porque muchos grupos se reúnen con les integrantes de su equipo durante el proceso de votación para leer y tomar decisiones en conjunto sobre sus votos; también reconocemos que la participación en persona y los procesos de toma de decisiones pueden enriquecer la experiencia de participación y conexión con el movimiento.

Por el momento, realizar el proceso de forma presencial no es factible para FRIDA, por lo que nos comprometemos a utilizar las muchas posibilidades que los espacios online pueden ofrecernos al tiempo que nos aseguramos de abordar también las desventajas de este formato¹⁰ .

Cuando reflexionamos sobre nuestro primer ciclo de concesión de subvenciones en 2012 y muchos de los ciclos siguientes, la falta de acceso a internet y el acceso desproporcionado entre las regiones crearon grandes retos y desventajas. Aunque esta brecha puede ser menor hoy en día, muchos grupos siguen dependiendo de una conexión a internet accesible para participar en este proceso.

Las colectivas de países en los que el acceso a internet está controlado por regímenes opresivos o sancionados, por ejemplo, no pueden acceder y presentar sus solicitudes de forma segura a través de nuestro sistema online, a pesar de que está construido con medidas de seguridad. Esto significa que estas colectivas tienen que invertir recursos y fondos personales adicionales para pagar el acceso a Internet o incluso los gastos de viaje a los cibercafés, incluso cuando presentan su postulación utilizando un documento de Word, etc. El propio FRIDA es un fondo en el que todas las operaciones se realizan en un espacio online, por lo que hemos aprendido a lo largo de los años a utilizar de la mejor manera posible las oportunidades que ofrece Internet, al tiempo que abordamos sus desventajas y problemas de seguridad. Mientras reimaginamos lo que es posible más allá de las condiciones actuales, estamos desarrollando herramientas para sortear estos retos y facilitar procesos de toma de decisiones participativos y significativos en un espacio online.

Aunque los procesos participativos de concesión de subvenciones en un espacio en línea tienen limitaciones, tienen el potencial de diversificar la participación y el alcance, y de apoyar a los grupos que están dispuestos a conectarse y que de otro modo no tendrían la oportunidad. FRIDA debe explorar y utilizar todas las herramientas en línea que pueda ofrecer, al mismo tiempo que entender cómo abordar el reto del acceso desigual a Internet.

FRIDA preguntará a los grupos si tienen acceso a Internet para entender qué tipo de desafíos podrían enfrentar durante este proceso participativo en línea, así como la forma de abordar esos desafíos. Los grupos también pueden ponerse en contacto con FRIDA si tienen algún problema de seguridad y FRIDA les apoyará.

La importancia de un plan de divulgación holístico

FRIDA se apoya en la amplitud de nuestras redes, comunidades, amistades y medios sociales para compartir información sobre cada convocatoria. En algunas ocasiones, hemos podido organizar eventos con el liderazgo de les integrantes del Comité Asesor para compartir más sobre FRIDA y nuestras oportunidades de financiación con las comunidades subrepresentadas en sus contextos. Por ejemplo, une asesore de FRIDA organizó un evento comunitario en la región del Pacífico, compartiendo información con mujeres jóvenes y jóvenes trans sobre cómo postularse a la convocatoria de FRIDA. Esto tuvo un gran impacto en ese ciclo de subvenciones en el número de grupos que se postularon desde esa región. Asesores, personal y colectivas coparte han organizado eventos similares en todas las regiones y también en espacios activistas internacionales. Estos eventos han ayudado a crear conexiones con comunidades que no han tenido acceso a la financiación de FRIDA antes, y a conocer el apoyo que necesitarían para solicitarla. Los eventos presenciales y en línea, y los procesos de divulgación específicos también nos han ayudado a aclarar nuestros criterios de financiación y a hacer más accesibles nuestros procesos.

Debido a que el alcance de la financiación de FRIDA es tan amplio, muchos postulantes potenciales se han sentido inseguros de si FRIDA estaría abierta a financiar su organización. Por ejemplo, FRIDA no era visible como una organización comprometida con el apoyo a la organización trans, por lo que tuvimos que hacer un trabajo intencional de divulgación y estrategia para que esas comunidades se sintieran invitadas a postularse. Las estrategias regionales de financiación que se incorporan a las subvenciones generales de FRIDA también nos permiten comprender quiénes faltan en nuestros procesos, los retos a los que se enfrentan los grupos en las distintas regiones a la hora de acceder a la financiación y cómo abordar esos retos¹¹ . Dichas estrategias informan el plan de alcance en cada contexto y apoyan nuestros procesos para abrazar la interseccionalidad, tanto en la convocatoria de postulaciones como en nuestro plan de comunicación y alcance directo. Los mecanismos participativos son útiles para diversificar nuestro proceso de concesión de subvenciones y sus resultados, pero no pueden funcionar aislados de otras herramientas que hacen que nuestros procesos sean más accesibles para una amplia gama de comunidades.

Las estrategias regionales que informan nuestros planes de divulgación son clave para guiarnos en la creación de condiciones para una participación significativa y diversa. También nos ayudan a comprender dónde tenemos que adaptar nuestro modelo, sistemas y criterios de financiación.

Para diversificar su proceso de concesión de subvenciones, FRIDA necesita trazar las necesidades de capacidad y el presupuesto para las oportunidades de alcance guiadas por las estrategias de financiación regionales y crear un proceso que pueda involucrar a los miembros de la comunidad de FRIDA en el intercambio de información sobre las oportunidades de financiación de FRIDA.

Apoyar el fortalecimiento de la capacidad de participación

Nuestras respuestas a las preguntas y preocupaciones de la comunidad sobre nuestros procesos son un espacio para practicar la construcción de la confianza. La construcción de esa confianza radica en cómo protegemos la seguridad de les implicades y cómo navegamos a través del conflicto de intereses y la dinámica de poder.

La comunicación oportuna, la respuesta a las consultas y la aclaración del proceso, el espacio para una mayor flexibilidad y el ajuste de los plazos son también importantes para cultivar las relaciones con las colectivas de jóvenes feministas que forman parte del proceso de postulación. Todos los grupos necesitan estar informados sobre el estado de su postulación o si habrá retrasos en el proceso, para que puedan planificar sus presupuestos y actividades en consecuencia.

Solicitar financiación es un proceso emotivo y agotador para muchas organizaciones, especialmente cuando funcionan sin suficiente capacidad de personal. Su participación significativa requiere tiempo, capacidad y, a menudo, recursos. Es importante ser flexibles y permitir más tiempo o cambios en las condiciones y prácticas de la postulación para adaptarse a las necesidades de los grupos, de modo que puedan participar activamente en el proceso. Muchos grupos que no han tenido la oportunidad de participar en un proceso participativo de concesión de subvenciones pueden necesitar apoyo a través de cosas como formaciones en vídeo y sesiones de preguntas y respuestas para aclarar el propósito y los criterios. Las colectivas feministas jóvenes se preocupan por cómo se distribuye la financiación en sus contextos y sienten que su participación en las decisiones de financiación es importante, pero su participación no siempre es posible dentro de las limitaciones de nuestro modelo, que a menudo no responde a sus realidades. Un proceso participativo significativo que aborde todas las condiciones que deben crearse para que los grupos participen lleva tiempo, pero ese tiempo conduce a un cambio más sustancial a largo plazo .

¿Y el tiempo de los movimientos?

Para que el proceso de votación de les postulantes impulse la decisión final de FRIDA, todos los grupos implicados deben votar dentro de su grupo de votación. Aunque este proceso ha sido gratificante para la mayoría de los grupos, algunos no tienen tiempo para dedicarse a este proceso. Los movimientos feministas jóvenes carecen de fondos y de capacidad, y sus integrantes asumen múltiples funciones dentro de sus colectivas mientras también trabajan, estudian y mantienen a sus familias. El proceso participativo de otorgamiento de subvenciones de FRIDA puede ser agobiante, especialmente cuando las colectivas a menudo se unen al proceso desde un lugar de agotamiento. Reflexionamos continuamente sobre esta cuestión y hemos mejorado nuestros sistemas a lo largo de los años para hacerlos más accesibles y menos exigentes. A veces, las colectivas necesitan reforzar su capacidad y habitar condiciones específicas para participar en el proceso de concesión de subvenciones de un financiador.

Todavía no disponemos de sistemas para compensar económicamente a los más de 500 grupos que participan cada año en el proceso de votación, pero ofrecemos apoyo a aquellos que tienen dificultades para postularse o participar, incluida la ayuda para la conexión a Internet. La mayoría de los grupos compartieron que el proceso de votación valió la pena y que ganaron mucho con él, sin embargo, también expresaron que fue abrumador, y , consumió su tiempo y recursos.

A pesar de que muchos grupos han compartido que no podrían imaginar otro sistema de concesión de subvenciones para un financiador feminista, todavía queremos que este proceso sea generativo y no abrumador. Esta ha sido una de las principales motivaciones para el cambio en el sistema de subvenciones de FRIDA.

FRIDA debería experimentar con otros modelos participativos que sigan manteniendo los valores feministas y apoyen la conexión del movimiento, sin crear una obligación de participar. En su lugar, podría ser un proceso en el que se comparta la información y los grupos puedan elegir no participar en función de sus intereses.

Abordar la complejidad de la conexión del movimiento

Construyendo el Poder Colectivo: ¿Y si no sabemos
lo suficiente para tomar una decisión?

Aunque los grupos han expresado que creen que las jóvenes feministas deberían decidir a qué se destina nuestra financiación y se consideran conocedoras de sus contextos, se han sentido incómodas por ser su voto el único factor de decisión. La mayoría ha expresado que, aunque todos los grupos son dignos de ser financiados, les preocupa no hacer la elección correcta al votar. Esta contradicción nos ha enseñado que no hemos sido del todo transparentes en cuanto a cómo los votos se unen y construyen con otros en una decisión colectiva. Para que se tome una decisión, es necesario que la mayoría de las colectivas voten de forma similar, lo que también confirma que comparten valores, necesidades, conocimientos y prioridades en su contexto. Parte del trabajo de esta contradicción consiste también en reprogramar la información cultural sobre el poder y representación que les jóvenes, especialmente las mujeres, personas trans, y personas no conformes con el género han recibido, diciendo que no se les toma tan en serio. Los grupos no se cuestionan si saben lo suficiente sobre organización, sino si saben lo suficiente sobre filantropía y procesos de financiación para tomar estas decisiones.

Muchos grupos han compartido que les gustaría influir en las estrategias de financiación de los donantes, pero que no están seguros de cuál es su punto de entrada o qué habilidades requiere esto. Ha habido una desconexión entre el conocimiento de su realidad vivida y su experiencia organizativa, y el conocimiento que los donantes han buscado para las decisiones estratégicas dentro de un contexto filantrópico. En la actualidad, la filantropía suele considerar a les jóvenes como expertos de su propia realidad. Sin embargo, esta perspectiva no se ha ampliado a otras áreas de experiencia que les jóvenes podrían tener en el diseño, la construcción y el desarrollo de sistemas de concesión de subvenciones, procesos de gobernanza y liderazgo que conciernen a su contexto y a su comunidad y al intercambio general del movimiento feminista entre generaciones. Participar en los procesos filantrópicos en las primeras etapas de organización cambia el sentido de incidencia de les jóvenes feministas y el poder de su voz en los procesos de financiación. Hemos sido testigos de este cambio en las colectivas de jóvenes feministas que FRIDA ha apoyado. Con el tiempo, están más dispuestas e interesadas en unirse a los procesos participativos de FRIDA porque pueden ver el efecto que la participación directa tiene sobre ellas.

El propósito de la participación debe ser claro para hacer crecer la representación y la comprensión entre les jóvenes feministas sobre la importancia de su voz para influir y presentar colectivamente soluciones en el espacio filantrópico. La dinámica de poder existente entre los donantes y las colectivas coparte, y los enfoques verticalistas de los donantes han creado la sensación de que las voces del movimiento no pertenecen a los procesos de toma de decisiones filantrópicas. Es fundamental cambiar no solamente sobre quién tiene el poder y el conocimiento para decidir, sino la mentalidad y la comprensión cultural sobre a quién pertenecen las decisiones de financiación.

FRIDA debe apoyar la co creación colectiva de conocimientos con les jóvenes feministas sobre la importancia de crear y ocupar espacios de decisión.

FRIDA debe facilitar más información sobre las colectivas, el proceso de concesión de subvenciones de FRIDA, a quiénes se ha financiado, las carencias, etc., para que las colectivas se sientan más capacitadas por la información que poseen para tomar decisiones.

Mantener las complejidades mientras se facilitan
las conexiones en el proceso de votación

En la convocatoria abierta de subvenciones participativas de FRIDA, hemos aprendido que les postulantes realmente creen que un proceso de toma de decisiones participativo se alinea con su visión de un mecanismo de financiación feminista. Sin embargo, esto no significa que se presenten con una confianza plena y sin dudas sobre la equidad de este modelo o que todes sus compañeres apliquen los mismos valores y principios. Es evidente que les jóvenes organizadores feministas reconocen la complejidad de los movimientos feministas. Las colectivas de jóvenes feministas han expresado su preocupación sobre si FRIDA será capaz de reconocer cómo el privilegio y el acceso pueden dirigir los resultados en los procesos participativos en diferentes contextos. Creen que, al igual que en cualquier otro proceso de concesión de subvenciones que han experimentado, ciertos grupos podrían ser excluidos o habrá más competencia que solidaridad. Cuando las experiencias vividas por les organizadores no están presentes en las decisiones relacionadas con los recursos, es imposible que esas decisiones se tomen desde una perspectiva interseccional. Sin embargo, esta perspectiva es clave para construir, practicar y ampliar una relación de confianza, cooperación e interconexión dentro del proceso de concesión de subvenciones participativas y, posteriormente, en la relación con el financiador.

Los resultados finales del proceso de votación suelen indicar que los grupos aplican una lente interseccional al votar por sus compañeros. Se aseguran de que se apoye a los grupos infrarrepresentados y a los que tienen menos acceso a la financiación en su contexto. Sin embargo, aunque los grupos sienten el valor de que sus pares lean y voten por su trabajo, sienten la necesidad de otra capa de revisión por parte del personal y los asesores de FRIDA que se centra principalmente en asegurar que se tengan en cuenta las preocupaciones en torno a cosas como la subrepresentación. Creen que FRIDA también tiene que entender cada contexto al que llega su financiación para organizar el proceso de votación y asegurarse de que los grupos infrarrepresentados y los que no tienen mucho acceso se tengan en cuenta de forma justa. Los colectivas han solicitado que FRIDA cree un sistema que pueda reconocer cuándo los grupos experimentan desventajas en su proceso de concesión de subvenciones participativas y cuándo es necesario el compromiso de FRIDA. Por esta razón, creemos que un proceso participativo por sí solo no creará conexiones de forma inherente, pero si hay un sistema y una estructura detrás, el proceso puede facilitar conexiones significativas.

FRIDA debe hacer transparente la estructura de este proceso, así como los mecanismos establecidos para minimizar el sesgo en el proceso de votación. Asimismo, el personal encargado de conceder las subvenciones y el Panel de Revisión entre Pares deben ser conscientes de la posible falta de equidad y de cómo se aborda en las decisiones finales.

¿Cómo aborda FRIDA la parcialidad y la equidad
en el proceso de votación?

La mayoría del personal, la junta y les asesores de FRIDA son jóvenes activistas y organizadores feministas. Dado que venimos de los movimientos, aportamos conocimientos sobre las muchas complejidades que puede conllevar la toma de decisiones impulsada por los movimientos. Sin embargo, cada ciclo de concesión de subvenciones nos pide que aumentemos nuestra comprensión de las estructuras y dinámicas de poder que pueden surgir en cada contexto sociopolítico. A menudo se revelan las condiciones que deben darse para que las comunidades con menos acceso representen plenamente sus realidades, visiones y estrategias en el proceso y sean igualmente reconocidas y dotadas de recursos. Con el tiempo, hemos aprendido a identificar en el proceso de votación cuándo ciertas comunidades, temas y estrategias no reciben votos. Las colectivas de jóvenes feministas de cada subregión abordan el proceso de votación de forma diferente, y a lo largo de los años se han desfinanciado o priorizado diferentes temáticas para distintas subregiones.

En los primeros años de este proceso de votación, por ejemplo, nos dimos cuenta de que los grupos votaban por las postulaciones escritas más fuertes, y que los grupos de organización más progresista no necesariamente votaban por los grupos emergentes de derechos de las mujeres que son más rurales. Para solucionar esto, FRIDA introdujo una etapa adicional en el proceso de revisión, en la que el Panel de Revisión entre Pares revisa los resultados de las votaciones. El Panel identifica las dinámicas complejas, así como las brechas, en cada contexto, y puede conceder subvenciones adicionales; basándose en el análisis contextual de cada subregión, la retroalimentación de las votaciones y la revisión de los resultados finales que impulsen las estrategias regionales de financiación. Esto también está conectado con los análisis generales sobre qué regiones están continuamente infrafinanciadas. La presupuestación de las subvenciones de FRIDA se encarga de cubrir estos déficits de financiación.

Por ejemplo, esto puede ser diferente según la zona geográfica:

En África Occidental, Oriental, Central y Meridional, el proceso de votación se organiza en inglés y francés de forma subregional y temática. Por ejemplo, hay grupos de votación separados para la organización de LBTQ+, colectivas centradas en la MGF/niñes, justicia climática y medioambiental, arte, etc. Dada la cantidad de propuestas que recibimos, esto ha permitido que se voten y apoyen estrategias y enfoques más diversos.

En América Latina, la votación es subregional, basada en el país y también aborda el acceso rural frente al de las grandes ciudades. También hemos establecido prioridades en torno al apoyo a la organización de indígenas y afrodescendientes. El proceso también se organiza en español y portugués.

En el Caribe, el proceso de votación es en tres idiomas, lo que significa que lo más probable es que la propuesta de cada uno tenga que traducirse a los tres, lo que puede requerir más reflexión.

El suroeste de Asia y el norte de África tienen las votaciones organizadas según la subregión, el país, el acceso al idioma y la zona rural frente a la gran ciudad.

En otras regiones, los grupos de votación son subregionales, basados en el idioma y el país, y se facilitan teniendo en cuenta la historia del movimiento feminista y de la organización de la justicia social, la dinámica sociopolítica y cultural, y cómo funcionan los sistemas de opresión entrelazados en ellos.

Con respecto a esto, las colectivas feministas jóvenes que se presentan pueden elegir la región con la que se sienten más conectadas, en lugar de ser colocadas en regiones basadas únicamente en la geografía. Hay historias compartidas que conectan diferentes contextos, comunidades y culturas que no tienen que ver sólo con la proximidad geográfica. Esto desbarata las narrativas dominantes sobre las regiones, las fronteras y la conexión, y descoloniza la idea de la distribución de la riqueza y los recursos .En muchos informes sobre la financiación de la justicia social, los datos se dividen por regiones, lo que no tiene en cuenta qué países, contextos o temáticas dentro de esas regiones están continuamente infrafinanciados. Hay muchas realidades que existen simultáneamente, y podemos aprender y abordar en comunidad las diferentes experiencias durante el proceso participativo de concesión de subvenciones.

FRIDA necesita seguir ampliando su conocimiento sobre las condiciones sociopolíticas que afectan a la organización de les jóvenes feministas en cada región de enfoque, con el fin de crear condiciones para una participación significativa y accesible desde una perspectiva interseccional.

FRIDA tiene que compartir con les postulantes los criterios que se tienen en cuenta a la hora de hacer las votaciones de los grupos, y el hecho de que existe otra capa de revisión después de que se hayan contado los votos.

FRIDA debería seguir compartiendo cuántos grupos de votación hay y cuántas subvenciones estarán disponibles en cada región.

¿Y si alguien toma nuestra idea?

La mayoría de los grupos compartieron en el proceso de retroalimentación que el aspecto más valioso del proceso participativo de concesión de subvenciones de FRIDA es que pudieron conocer y ser testigos de la abundancia de estrategias organizativas y de la resistencia de los movimientos en su contexto. Sin embargo, algunos grupos expresaron su preocupación de que otros tomaran sus ideas y solicitaran financiación para ellas en otros lugares. Esta era una preocupación especialmente presente en contextos en los que han visto una financiación tradicional y benéfica irresponsable que ha aumentado los silos, la creación de "empresas de ONG" y la competencia por los recursos. Estas preocupaciones existen tanto en los procesos de concesión de subvenciones tradicionales como en los de revisión entre pares.

Sin embargo, las estrategias de financiación interseccional, descolonizadora y basada en el movimiento son lentes importantes para la distribución de recursos. De lo contrario, muchas organizaciones emergentes o que operan en contextos desafiantes pueden quedarse sin financiación y las fricciones del movimiento pueden ser aún más profundas. Muchas colectivas han compartido que los donantes suelen considerar que los grupos con más visibilidad y acceso en sus contextos son más fiables para gestionar los fondos y, por tanto, les dan prioridad en las convocatorias. En esta dinámica, los grupos que pueden tener más visibilidad pueden adoptar la idea o la estrategia de otras colectivas sin trabajar en colaboración con ellas. Reconocemos este reto, por lo que pedimos a los grupos que compartan en el resumen de su propuesta sólo la información que quieren que lean los demás grupos. Recordamos a los grupos la confidencialidad y nos aseguramos de que haya un proceso de debida diligencia antes de que los grupos pasen al proceso de votación.

Al mismo tiempo, todos los grupos han estado dispuestos a conectarse con otros después del proceso de votación para compartir sus conocimientos, hacer preguntas y, a veces, aplicar estrategias similares en sus propios contextos. Hicieron saber a FRIDA con qué grupos les gustaría conectar y por qué. Por ejemplo, un grupo compartió que, aprender sobre cómo otro grupo estableció su proceso de investigación les inspiró a enfocar su propia investigación de manera similar. Todos los grupos comparten que si algún grupo está interesado en aprender sobre su trabajo, ese grupo puede conectarse con ellos. El componente de intercambio entre movimientos del proceso participativo de FRIDA ha sido la experiencia más gratificante para la mayoría de les postulantes. Una de las principales conclusiones es que todos los grupos se sintieron inspirados por los demás, y la inspiración es un importante motor de organización en los movimientos por la justicia. Por lo tanto, se trata más bien de crear mecanismos que hagan que este intercambio de conocimientos sea transparente, recíproco y mutuamente responsable. Es necesario facilitar el intercambio entre pares en este proceso para que los grupos puedan hacer un seguimiento de cómo contribuyen al trabajo de les demás, y compartir cómo han adaptado los nuevos aprendizajes.

Para la sostenibilidad de los movimientos feministas, es fundamental tener una abundancia de estrategias exitosas compartidas y replicadas a través de las intersecciones de los movimientos. Esto puede multiplicar el impacto y la alineación de nuestro trabajo. Queremos fortalecer el proceso de facilitación de FRIDA para que cuando los grupos busquen inspiración y quieran aprender más sobre las estrategias de los demás, puedan llegar directamente y conectarse entre sí.

FRIDA debería crear un mecanismo para conectar a los grupos después del proceso de votación para intercambiar conocimientos y crear conexiones.
Si bien FRIDA necesita mantener la transparencia de su proceso participativo de concesión de subvenciones, también debemos considerar cómo proteger con confidencialidad cualquier información que los grupos quieran compartir sólo con FRIDA.

¿Qué pasa si los grupos se conocen en el proceso
de votación, incluso cuando son anónimos?

Aunque algunos grupos puedan reconocerse entre sí a pesar del anonimato del proceso de votación, y aunque se voten entre sí, no influye mucho en la votación porque cada grupo tiene que votar a 5 grupos diferentes. La razón principal del anonimato no es sólo proteger a los grupos que se conocen entre sí para que no se voten unos a otros. Es para asegurar que haya una capa de seguridad y confidencialidad en el proceso. Si un grupo conoce a otro grupo, y cree que está haciendo un gran trabajo y quiere darle un voto de solidaridad, esto sigue siendo parte de la conexión del movimiento que nuestro proceso participativo pretende alimentar. Tampoco garantiza que ningún grupo reciba financiación, ya que otras 15 colectivas de ese grupo de votación también tienen que votar por un grupo para que éste obtenga el mayor número de votos. Los grupos tienen que votar alineados entre sí para que un grupo reciba una subvención, y también deben compartir por qué creen que los grupos a los que votan deberían recibir financiación. Se trata de un proceso de toma de decisiones colectiva , por lo que ningún grupo recibe financiación sólo porque uno o dos grupos los conozcan y voten por ellos.

¿Existe otra capa de revisión para los resultados de las votaciones?

Reconocemos que para muchas colectivas feministas jóvenes que participan en nuestro proceso de concesión de subvenciones, es la primera vez que se comprometen con un modelo de subvención de este tipo. Además, no todos los grupos están familiarizados con el lenguaje de las organizaciones sin ánimo de lucro, que por mucho que intentemos alejarnos de él, sigue dominando la forma de hablar de la financiación. Para añadir una capa extra de apoyo, el Panel de Revisión entre Pares de FRIDA revisa los resultados de las votaciones una vez que éstas han finalizado, e identifica las brechas, los temas y las comunidades subrepresentadas, o si algún grupo no ha recibido votos debido a la parcialidad e imparcialidad. Una vez que el Panel de Revisión entre Pares revisa los grupos que han recibido más votos, pueden añadir información adicional sobre cada propuesta, incluyendo si creen que una propuesta se ajusta a un asunto, temática o comunidad infrafinanciada que no ha sido financiada antes. También pueden añadir notas en las propuestas que aborden la parcialidad, el acceso y cualquier otro desafío que los grupos puedan haber enfrentado en el proceso de votación.

Esta capa de revisión nos ayuda a entender más profundamente cómo los sistemas de opresión habitan los espacios del movimiento y a veces dirigen el resultado de los procesos de toma de decisiones participativas. Por ejemplo, si dos grupos tienen el mismo número de votos y FRIDA sólo puede financiar a uno, los miembros del Panel de Revisión por Pares tomarán la decisión final con una lente interseccional y considerando el acceso a la financiación. Del mismo modo, el Panel puede conceder subvenciones adicionales a grupos subrepresentados y proporcionar una opinión general sobre el proceso de votación para asegurar que se alinea con los valores y principios del modelo de FRIDA. Esto también responde a la petición de las colectivas de jóvenes feministas de que FRIDA lleve a cabo una revisión final del proceso de votación para abordar el sesgo y el acceso.

FRIDA necesita compartir los detalles de su proceso de Panel de Revisión por Pares con la comunidad y también asegurarse de que las herramientas y directrices proporcionadas a los Paneles de Revisión entre Pares se actualicen con los comentarios antes de cada ciclo.
FRIDA debe asegurarse de que los grupos sean informados cuando les asesores concedan subvenciones adicionales, y debe compartir cualquier información importante acerca la revisión de los votos finales del Panel de Revisión entre Pares.

Aprendizaje del movimiento, conexión y alineación

Conexiones del movimiento a lo largo del
proceso participativo de concesión de subvenciones

La mayoría de los grupos de jóvenes feministas han compartido que el proceso participativo de concesión de subvenciones de FRIDA les permitió aprender sobre la diversidad de la organización en su región y visualizar las posibilidades de conectarse a través de las geografías. Consiguen experimentar su organización como parte de una visión más amplia del movimiento en la que el trabajo de todes y cada une es valioso e importante para la resistencia, la sostenibilidad y el crecimiento del movimiento en general. Las diferentes perspectivas se comunican entre sí y se basan en las visiones de les demás, lo que aporta una mayor cohesión al movimiento a través de la diversidad de la organización. Este es un espacio potente que puede catalizar la conexión del movimiento feminista joven que va más allá del proceso de concesión de subvenciones de FRIDA. Los procesos participativos de concesión de subvenciones con este componente de conexión pueden, de hecho, ampliar la empatía, la compasión y la comprensión de los muchos y variados problemas sociales que afectan a las vidas de las personas que comparten el mismo espacio de movimiento. Las colectivas de jóvenes feministas pueden construir nuevas corrientes de solidaridad a través de este tipo de intercambio de conocimientos y pueden elevar el activismo de los demás a través de este proceso. Casi todos los grupos han expresado el deseo de conectarse con otros en el proceso de votación, y han compartido una justificación de por qué esa conexión era importante para elles. Muchos grupos han compartido que su visión del futuro feminista se amplió al conectarse con otres, al igual que su comprensión de que esta lucha requiere conexiones generativas y prácticas de colaboración para guiar el camino.

Durante el proceso de votación, los grupos pueden apoyar las propuestas de los demás y abogar por que se financien trabajos diferentes a los suyos. También pueden expresar sus preguntas, dudas y preocupaciones sobre cualquiera de las propuestas. Las preguntas suelen ser menos técnicas y más sobre la atención al bienestar, la seguridad y las necesidades de capacidad de los grupos durante la ejecución de sus proyectos. Además, muchos han expresado un profundo sentimiento de compasión e inquietud por la posibilidad de que muchas colectivas no reciban financiación en el actual ciclo de subvenciones.

Muchos grupos han compartido que incluso si su colectiva no recibe la financiación, la noticia es menos desafiante porque saben que otras estrategias e ideas feministas jóvenes importantes están recibiendo la financiación en su lugar. Como dijo una de las colectivas participantes, que no se sintieron decepcionades "porque formamos parte de esos movimientos, el trabajo de les demás también nos beneficia a nosotres, a nuestras comunidades y habla de nuestro trabajo". Un ejemplo de la profunda solidaridad que puede inspirar este proceso de concesión de subvenciones es que, tras recibir una subvención de FRIDA a través de un proceso participativo, un grupo devolvió su subvención: fueron testigos de otro increíble trabajo de organización que necesitaba recursos y, dado que surgió otra oportunidad de financiación para elles, decidieron que su subvención de FRIDA debía ir a otros grupos. El proceso participativo de concesión de subvenciones nos invita a conocer nuevas estrategias y luchas y a comprometernos desde la compasión, así como a practicar la reimaginación y la co creación de espacios de justicia entre nosotres.

FRIDA debería explorar qué capacidades son necesarias para crear un sistema seguro que pueda facilitar las conexiones entre colectivas después del proceso de votación.

FRIDA podría ampliar la plataforma actual que utiliza para apoyar a los grupos a conectarse en este proceso, así como utilizar la plataforma para compartir recursos con una comunidad feminista joven más amplia, permitir que las colectivas coparte actuales se conecten con otres que se postulan en su región, y colaborar entre sí.

Sin embargo, no es necesariamente un proceso no competitivo

La concesión de subvenciones participativas puede ayudarnos a practicar más la colaboración y la solidaridad a la hora de tomar decisiones sobre los recursos, pero no necesariamente se sentirá no competitiva para todes. La toma de decisiones participativa no es necesariamente lo contrario de la competencia, y la participación por sí sola, sin una infraestructura de atención, no necesariamente inspirará la solidaridad. Si no reconocemos que la participación y la competencia pueden coexistir en nuestro proceso de forma simultánea, no reconocemos las dinámicas impuestas por la opresión y la desigualdad que no desaparecen simplemente incluso en un sistema que en su esencia pretende desafiar esas dinámicas.

La configuración actual de los privilegios y la opresión estructurales en todos los contextos del mundo está siempre presente en los procesos de los financiadores. Incluso cuando establezcamos prácticas alternativas, éstas no estarán necesariamente libres de competencia, imparcialidad, desacuerdo o desconfianza. Los organizadores se presentan a nuestro proceso desde condiciones y niveles de acceso muy diferentes. Tenemos que reconocer las complejidades que existen y reconocer que los procesos participativos no siempre son sencillos. Muchas colectivas movilizan muchos de sus recursos internos para solicitar financiación, especialmente a los donantes internacionales y a la filantropía privada. Esa solicitud conlleva su poder, su lucha y las soluciones que les acercarían a los futuros que sueñan. No recibir los recursos tan necesarios puede ser igualmente decepcionante en cualquier proceso de concesión de subvenciones, incluso cuando el proceso es participativo, debido a las posiciones a menudo precarias de las organizaciones.

Un grupo ha compartido con nosotros que les resultaba difícil presentarse y apoyar las propuestas de otros grupos aunque estuvieran alineadas con sus valores, porque en ese momento se estaban organizando desde un lugar de agotamiento y capacidad y recursos limitados. Algunos grupos han compartido que fue al mismo tiempo sorprendente y desafiante saber que su solicitud fue revisada al lado de otras y que tanto trabajo organizativo importante requiere recursos. Puede que esto no sea la realidad para todos, pero no podemos pasar por alto el hecho de que en cada ciclo, más de 400 grupos no reciben una subvención de FRIDA. Por esta razón, no esperamos que la sola participación en nuestras prácticas de concesión de subvenciones las haga no competitivas, sino que abre un espacio para que nuestra compasión, empatía y confianza crezcan a pesar de ello.

Muchos grupos que reciben subvenciones han estado interesados en colaborar con aquellos que no recibieron una subvención. FRIDA puede apoyar esta conexión.

FRIDA se compromete a apoyar a los grupos que pasan por nuestro proceso de votación para que se pongan en contacto con otros donantes y fondos hermanos que podrían apoyar a los grupos que nosotros no pudimos durante cada ciclo. Pedimos a los grupos su consentimiento para compartir su propuesta e información de contacto con otros financiadores.

Reconstruir la confianza en nuestras conexiones

La mentalidad competitiva sobre los recursos en la organización de la justicia social tiene sus raíces en muchos años de prácticas de financiación que no han priorizado la catalización de las conexiones entre los movimientos. En muchos casos, las estrategias de financiación poco transparentes han provocado fricciones en los movimientos, han fomentado el trabajo en silos y han colocado a las comunidades marginadas y con poca financiación en posiciones precarias. Estos modelos del paisaje filantrópico han creado las condiciones para la competencia. Los donantes que desean apoyar verdaderamente a los movimientos tienen la gran responsabilidad de romper los ciclos de competencia y fomentar la conexión. Los movimientos por la justicia necesitan mecanismos de financiación y apoyo que centren las necesidades e intereses del movimiento y que inspiren la colaboración, la solidaridad y la responsabilidad mutua. La concesión de subvenciones participativas es una forma de desafiar estas dinámicas y formar nuevos tipos de relaciones entre donantes y movimientos. Los sistemas competitivos inhiben nuestra capacidad de crear conexiones entre los movimientos, pero el proceso participativo de concesión de subvenciones está centrado en la creación de relaciones antes de los resultados finales de la toma de decisiones. Los donantes tienen la gran responsabilidad de apoyar la conexión entre movimientos y no aumentar la competitividad.

Los procesos participativos de concesión de subvenciones desafían la forma competitiva y capitalista neoliberal de trabajar, aislada de la comunidad y de otras organizaciones. Nos recuerdan las economías solidarias y los principios de colaboración que sustentan nuestro trabajo y nos permiten practicar a pequeña escala lo que esperamos que se convierta en prácticas más amplias del movimiento. El proceso de FRIDA consiste en aprender a tomar decisiones de financiación de forma colectiva, sabiendo que toda la organización está interconectada y es igualmente importante. Los donantes necesitan sistemas que faciliten el aprendizaje, el intercambio y la solidaridad activa y la inspiración, al tiempo que reconocen que todes les que se postulan necesitan por igual las subvenciones que tenemos disponibles. Comprender esto puede ayudar a los donantes a captar todo el potencial de la concesión de subvenciones participativas, al tiempo que reconocen sus limitaciones.

Feedback de la votación: Cuando el resultado coincide con la contribución

Cuando las comunidades se conectan con el impacto de su participación en el proceso de concesión de subvenciones, puede cambiar fundamentalmente la forma en que se relacionan con su poder y su participación en la acción colectiva y la transformación dentro de sus comunidades. Los grupos consiguen ser testigos y estar en relación con el impacto de su participación, y también de que haya algún nivel de alineación del movimiento en los resultados que surgen. El proceso de votación es muy diverso e implica muchas estrategias organizativas radicales y poco financiadas, enfoques innovadores o soluciones que pueden parecer arriesgadas o que normalmente no reciben apoyo a través de la financiación tradicional. Un proceso participativo transparente e impulsado por el movimiento interviene en las dinámicas organizativas que se ven afectadas por los sistemas de opresión y financiación entrelazados que refuerzan la competencia. Interrumpimos estas pautas y expectativas creando un espacio para presenciar la interconexión y practicar la compasión, la responsabilidad y la solidaridad activa.

Aunque entre les postulantes hay muchas diferencias en cuanto a enfoques, prioridades y alineamientos, en las decisiones finales de las votaciones surge algún marco compartido en torno a valores y principios. Las oportunidades y los retos que los grupos han compartido con nosotres han sido muy coherentes, basados en valores de seguridad, respeto mutuo, conexión y estrategias de liberación. Ayudar a los grupos y movimientos a ver esta sinergia y alineación de valores es tan importante como los resultados de la toma de decisiones. Este sistema permite a las colectivas elevarse, afirmarse mutuamente y construir relaciones de apoyo que contribuyen a una política de responsabilidad comunitaria basada en valores de seguridad, respeto, responsabilidad mutua, conexión y liberación colectiva. Los grupos se preocupan por cómo se distribuye la financiación en su contexto y sienten que su participación en esas decisiones tiene un impacto. Muchos grupos compartieron que sentían un compromiso aún mayor con su trabajo y que compartían sus progresos con sus compañeres que les habían votado. Sintieron un mayor sentido de la responsabilidad, sobre todo porque saben cuántas propuestas estupendas habían en el proceso. Los grupos que reciben subvenciones comparten notas de solidaridad con quienes les han votado, y muchos han expresado su deseo de que FRIDA les conecte después de la votación, para que puedan trabajar en colaboración más allá del proceso de concesión de subvenciones.

Incluso cuando existe un sentimiento de competitividad, somos testigos de la compasión y la empatía que guían a los grupos en este proceso de toma de decisiones. Esto se pone de manifiesto en la justificación de la votación que comparten para cada grupo al que dan su voto. En su justificación, los grupos siempre aplican análisis de contexto y lentes interseccionales sobre el trabajo que no cuenta con suficientes recursos en su región, y al que los donantes pueden ser menos propensos a dar prioridad. Esta retroalimentación de la votación no sólo influye en los resultados finales, sino también en algunos de los criterios generales de financiación de FRIDA. Por ejemplo, las actividades de generación de ingresos han estado fuera de los criterios de financiación de FRIDA durante mucho tiempo. Sin embargo, vimos en un proceso de votación que un grupo que quería abrir un espacio queer generador de ingresos para apoyar su trabajo LGBTQI+ recibió el voto de todes en su grupo de votación. Todos las colectivas que votaron por elles hicieron hincapié en lo importante que es la financiación autónoma en su contexto y en que deberían apoyarse más proyectos de este tipo. Ahora, FRIDA financia actividades generadoras de ingresos que están dotando de recursos al activismo de los grupos. Éste es sólo uno de los muchos ejemplos de cómo este proceso de votación cambia nuestra estrategia y nuestros criterios y nos permite aplicar enfoques más específicos para cada contexto.

FRIDA debería ampliar la plataforma actual para que haya más oportunidades de compartir las justificaciones de voto que los grupos dejan para los demás. Esto puede ayudar a los grupos a ver cuánto tiempo y esfuerzo han dedicado otres postulantes a leer su solicitud, y a entender cómo otros grupos consideraron que era importante que su trabajo fuera financiado.

Reflexiones y retos internos

Sobre el bienestar y las transiciones sostenibles

Desde sus inicios, el proceso de concesión de subvenciones de FRIDA fue dirigido y facilitado por un miembro del personal y un comité asesor de jóvenes activistas feministas. A lo largo de los años, el modelo participativo de concesión de subvenciones de FRIDA se ha modificado para adaptarse a las necesidades de los movimientos feministas jóvenes. En tiempos de capacidad limitada, ha sido clave que el modelo participativo de FRIDA sea facilitado por personal que proviene de la organización de jóvenes feministas. Las experiencias de primera mano de las necesidades de la organización de les jóvenes feministas se incorporan al proceso de concesión de subvenciones que existe hoy en día, y ha fortalecido la confianza entre el personal de concesión de subvenciones de FRIDA y les jóvenes feministas postulantes. Este proceso ha sido muy abrumador para el personal de FRIDA que lo ha facilitado, por lo que FRIDA se ha tomado un descanso entre ciclos para documentar y transferir conocimientos antes de que comience el nuevo ciclo.

Aunque las capacidades del personal de FRIDA han crecido con el tiempo, debemos reconocer que mientras celebramos nuestro trabajo, también debemos reflexionar sobre los recursos que requiere facilitar un proceso significativo de toma de decisiones participativas -recursos como personal, tiempo, conocimiento, paciencia, cuidado profundo y atención a les postulantes y orientación en cada paso del camino. FRIDA se compromete a proporcionar estos recursos porque sabemos que se necesita de una aldea feminista para facilitar un proceso participativo, mejorar los sistemas y permitir un flujo sostenible de conocimientos en toda la comunidad de FRIDA. Los enfoques interseccionales, el conocimiento sobre cada región y contexto, y las dinámicas dentro de ellos, son necesarios para continuar creando espacio y acceso para procesos participativos significativos. Con una capacidad limitada, ha sido abrumador para el personal de concesión de subvenciones facilitar el proceso de concesión de subvenciones, construir, adaptar y evaluar el sistema, y también documentar todos los aprendizajes para apoyar transiciones sostenibles. Hemos sido testigos de lo que ocurre cuando una sola persona tiene todo este conocimiento y de lo mucho que puede durar el proceso de orientación, lo que hace que este tipo de enfoque sea insostenible. En el ciclo 2022, las transiciones y la falta de capacidad interna han afectado a la duración del proceso. De cara al futuro, tenemos previsto reflexionar sobre los sistemas de capacidad necesarios para que este modelo sea sostenible durante las transiciones de personal cuando una nueva energía tome el relevo.

FRIDA debe identificar qué es necesario para la sostenibilidad de su proceso de concesión de subvenciones y qué debe cambiar en el modelo para que la transferencia de conocimientos sea más sencilla.

FRIDA necesita descentralizar los conocimientos sobre su proceso de concesión de subvenciones para que estén en manos de múltiples miembros del personal.

Construir prácticas participativas con los movimientos feministas jóvenes

Este proceso de investigación nos ha mostrado que la mayoría de las colectivas de jóvenes feministas aplican enfoques participativos en la toma de decisiones dentro de sus propias organizaciones, así como con sus comunidades y otros movimientos feministas. Les jóvenes organizadores feministas han expresado que se imaginan a les donantes feministas como donantes participatives, y nos han ofrecido grandes ideas y alternativas sobre cómo mejorar nuestro modelo. Muchos grupos también han compartido que después de participar en el proceso participativo de concesión de subvenciones de FRIDA, utilizaron modelos de toma de decisiones similares en sus organizaciones. Existe la oportunidad de construir conocimiento y soluciones que sean dirigidas por el movimiento y prácticas que se ajusten mejor a las necesidades de les organizadores. La participación ha ayudado a les organizadores feministas a construir redes de apoyo y una visión colectiva para nuestra comunidad. A lo largo de los años, FRIDA ha construido su conocimiento sobre la concesión de subvenciones participativas principalmente con la comunidad filantrópica y donantes pares. Mientras seguimos formando parte de una comunidad de práctica filantrópica, nos encantaría reimaginar este espacio de co creación de conocimientos junto con los movimientos feministas jóvenes y considerar más a fondo cómo podría ser el intercambio de conocimientos en la práctica. La filantropía necesita un cambio narrativo para que la producción de conocimiento sea más participativa y para que los movimientos participen en la creación de soluciones para los procesos que les conciernen. Hay fuertes prácticas participativas feministas jóvenes que ya existen en los movimientos, de las que muchos donantes pueden aprender para crear enfoques de financiación que respondan mejor al contexto de cada movimiento (y compensar a los movimientos por su experiencia). También hay muchas formas diferentes de construir relaciones de solidaridad, responsabilidad y apoyo en nuestros respectivos contextos. A través de la creación de conocimiento participativo, queremos practicar soluciones de financiación de movimientos feministas jóvenes, cultivar una auténtica conexión con el movimiento y encarnar prácticas de solidaridad feminista que sigan existiendo incluso cuando la filantropía no lo haga.

FRIDA debería apoyar la cocreación de conocimientos sobre prácticas participativas junto con los movimientos feministas jóvenes en una comunidad de práctica donde estos aprendizajes, recursos y soluciones estén disponibles para toda la comunidad más allá del proceso de concesión de subvenciones.

Los procesos participativos tienen su propio ritmo

Se ha hablado mucho de que los procesos participativos de concesión de subvenciones requieren más tiempo, pero creemos que esto no es necesariamente cierto, especialmente cuando un proceso participativo está bien organizado. Una participación significativa puede requerir más tiempo y atención si no tenemos una estructura que mantenga unidas todas las piezas importantes y las complejidades del proceso. La creación de estos sistemas también puede llevar tiempo, y creemos que invertir este tiempo es esencial en todos los procesos de financiación, independientemente de si son participativos o no. Estamos dotando de recursos a una organización que es compleja, y tenemos que financiar de forma responsable. Los procesos participativos en FRIDA no sólo requieren tiempo, recursos y capacidad, sino también experiencia. Sin embargo, hemos aprendido que, con el tiempo, algunas etapas de nuestro proceso se vuelven más sencillas porque todos los que participan tienen más experiencia.

Hemos aprendido qué sistemas debemos tener para acelerar etapas que, de otro modo, podrían llevar tiempo. Hemos pasado de las hojas de Excel a los sistemas integrales de concesión de subvenciones que también diseñamos, y esta transición ha llevado tiempo. Tenemos que reconocer que, aunque la participación pueda llevar tiempo, nuestra disposición y los sistemas de apoyo tienen que estar preparados para minimizar el tiempo que conlleva todo. Para nosotres, estos sistemas fueron los principios y valores principales de nuestro modelo, un software en línea y nuestra experiencia en facilitar este proceso. Hemos aprendido que los procesos participativos de concesión de subvenciones tienen un gran impacto más allá de la financiación, y estamos aprendiendo continuamente sobre este potencial. Los aprendizajes de los procesos participativos han sido una herramienta importante para crear estrategias de financiación colaborativa dentro de FRIDA que hoy permiten que muchas otras decisiones programáticas y de concesión de subvenciones avancen más rápidamente.

Las posibilidades y visión de futuro de este modelo

La subvención participativa es la forma en que avanzamos

Les jóvenes feministas imaginan a FRIDA utilizando un modelo de recursos participativo y feminista, por lo que FRIDA seguirá comprometida con nuestro modelo actual. Este compromiso también significa mejorar continuamente el modelo, como hemos estado haciendo incluso desde antes de esta evaluación, para poder adaptarlo y descubrir todas las posibilidades que tiene más allá de las decisiones sobre la distribución de recursos. Los procesos participativos pueden fortalecer el intercambio entre movimientos, las conexiones y la alineación, todo lo cual añade una importante calidad y valor a los recursos que compartimos. Ahora tenemos más claro cómo podemos centrar nuestro modelo en aspectos que resulten gratificantes para la comunidad feminista joven y que resuenen con ella, sin añadir una capa adicional de trabajo o dificultad para elles. Adaptamos nuestro sistema y proceso para garantizar que les jóvenes feministas se sientan invitades a participar en las decisiones que les conciernen, y de manera que se reconozca su capacidad de acción e impacto, en lugar de hacerles sentir que están actuando por obligación ante un financiador.

Exploración de un modelo integrado

Un modelo integrado supondría mantener el proceso de votación como opcional, de modo que les que tengan tiempo puedan participar, mientras que les que no lo tengan puedan excluirse sin que ello afecte a los resultados de la votación. Los grupos seguirían leyendo sobre el trabajo de los demás, votando y dejando comentarios que apoyen a los grupos que quieren que reciban financiación. Toda la información se enviaría a un panel de revisión entre pares formado por un grupo diverso de activistas de las comunidades de asesores y copartes. El Panel de Revisión entre Pares tomaría entonces las decisiones finales basándose en la información del proceso de votación, las estrategias de financiación regionales y temáticas y su proceso de votación. Para adaptar este proceso a un nuevo modelo integrado, FRIDA necesitaría:

Ampliar el panel de revisión entre pares

Una reflexión clave para nosotres es que debemos tener en cuenta el tiempo de les organizadores, así como la compensación por su contribución a este proceso. Por esta razón, hemos explorado la posibilidad de ampliar los paneles de revisión entre pares para incluir a las comunidades de colectivas coparte actuales y en transición. Este modelo piloto, que probamos durante los dos últimos años, nos ayudó a ver cómo incluir a las colectivas coparte en esta fase del proceso mejoraba la participación en la toma de decisiones en general. Este nuevo modelo es posible hoy en día porque FRIDA está apoyando a más de 250 coparte en este momento a través de regiones que son diversas en cuanto a antecedentes, estrategias de organización, idiomas y acceso, lo que añade matices e intersecciones necesarias al Panel de Revisión entre Pares.

Hay un gran interés entre las colectivas coparte por participar en este proceso, y FRIDA puede ahora compensarles más fácilmente por sus contribuciones. Adoptarlo en nuestra convocatoria abierta de postulaciones también permitiría la conexión de movimientos, la responsabilidad compartida y el establecimiento de la confianza entre las comunidades de asesores, personal y copartes. De esta manera la decisión final la tomaría el Panel de Revisión entre Pares en lugar de sólo en el proceso de votación de les postulantes . Este nuevo modelo implica aumentar nuestro presupuesto para la participación de las colectivas coparte, implementar nuevos enfoques para facilitar el proceso y aumentar la capacidad del personal. Sin embargo, en general, esto agilizaría el proceso de revisión de postulaciones y de toma de decisiones, con plazos más claros y claridad en las funciones. El proceso también tendría una mayor transparencia, aunque las decisiones finales seguirían siendo tomadas por la comunidad feminista joven que integra el panel de revisión entre pares.

Que el proceso de votación sea opcional

La mayoría de les jóvenes feministas postulantes consideraron que su experiencia de participación en el proceso fue única y gratificante. Por lo tanto, su participación debería seguir formando parte del proceso de concesión de subvenciones de FRIDA, pero centrándose más en la toma de decisiones informada por el movimiento, la transparencia, la creación de confianza, la conexión y el aprendizaje. Las colectivas de jóvenes feministas deberían leer el trabajo de les demás, decidir colectivamente las prioridades y compartir los comentarios dentro de los límites de sus capacidades e intereses. Como FRIDA no tiene la estructura para compensar a los 500 colectivas que participan en cada ciclo de votación, la votación debería ser opcional y los grupos deberían recibir una comunicación clara sobre los beneficios de participar.

Los comentarios y los datos muestran que la mayoría de los grupos seguirían participando en este proceso, sin embargo, queremos permitir la participación opcional de los grupos que por cualquier razón no sientan que pueden contribuir, pero que quieran observar, aprender y quizás conectarse más adelante. FRIDA seguiría recibiendo información del proceso de votación que informa nuestras estrategias y criterios de financiación regionales y temáticos, así como nuestro conocimiento sobre las necesidades de las jóvenes organizadoras feministas, y la retroalimentación de la votación puede seguir guiando las decisiones finales tomadas por el Panel de Revisión entre Pares. Este proceso permitiría a les postulantes participar de diferentes maneras, manteniendo el proceso transparente y sensible a su tiempo y capacidad. Esto también ayudaría a los Paneles de Revisión entre Pares y al personal a facilitar las complejidades en torno a los sesgos, el acceso y la falta de alineación, mientras se siguen apoyando las conexiones significativas, la construcción del movimiento y la dotación de recursos.

Comprometerse a expandir continuamente la accesibilidad

Los procesos participativos requieren un compromiso continuo de reflexión sobre las dinámicas de poder no equitativas, la accesibilidad y las diferentes complejidades que puedan surgir. FRIDA explorará las formas de ampliar su convocatoria para incluir más idiomas, considerar el acceso a Internet y crear las condiciones necesarias para que ciertas comunidades puedan presentar sus postulaciones. Esto también incluye la creación de comunicaciones que clarifiquen nuestros procesos, hagan que la información esté disponible en diferentes formatos y aumenten la transparencia de manera que no comprometan la seguridad y el bienestar de les implicades. Esperamos que este informe sea un comienzo de esa comunicación sobre nuestro trabajo y el propósito de este proceso. También esperamos que sirva para orientar estrategias claras y planes de divulgación que sigan ampliando la accesibilidad y la diversidad de nuestros procesos.

Conectar grupos después del proceso de votación

El proceso participativo de concesión de subvenciones de FRIDA crea un impulso para desafiar, desaprender y sanar las prácticas de los donantes que no rinden cuentas y que han afectado la infraestructura del movimiento feminista, y para construir enfoques más sostenibles para compartir y distribuir recursos. Nuestro enfoque crea un espacio para la responsabilidad mutua, en el que las colectivas feministas jóvenes aprenden a organizarse en su contexto y cómo eso contribuye a su trabajo y a nuestra liberación colectiva. Pueden crear colaboraciones, aprender unas de otras y construir una mayor visión del movimiento y alineación de estrategias. El desarrollo de movimientos activistas en espacios en línea es posible, y FRIDA tiene una gran oportunidad y responsabilidad de utilizar su financiación para ampliar las conexiones del movimiento, incluso más allá de nuestras subvenciones. FRIDA explorará formas de crear un espacio en línea donde los grupos que deseen conectarse después del proceso de votación y colaborar puedan hacerlo con seguridad. Esto requeriría un aumento del presupuesto y de la capacidad de FRIDA, pero también podríamos explorar colaboraciones con otros fondos y organizaciones para hacerlo realidad.

Co-crear con los Movimientos de Jóvenes Feministas

Nuestras conversaciones con jóvenes organizadores feministas sobre los enfoques participativos de la organización, la financiación y las estructuras organizativas también han sido una fuente de inspiración, tanto para nosotras como para les organizadores. El aprendizaje participativo permite que diferentes conocimientos y experiencias se unan y creen soluciones y enfoques conjuntos que centren los futuros feministas. FRIDA explorará cómo podemos intercambiar nuestros conocimientos sobre las prácticas participativas con los movimientos feministas jóvenes, compartir soluciones y llevar esas soluciones a contextos filantrópicos. Queremos que este conocimiento sobre la participación significativa y la conexión viva más allá del proceso de concesión de subvenciones de FRIDA y que sobreviva a la filantropía como práctica para cuidar los movimientos.

Sostenibilidad de la práctica de concesión de subvenciones

FRIDA dedicará un tiempo, antes de su próximo ciclo de subvenciones, a imaginar las necesidades, los sueños y el futuro de nuestro equipo de subvenciones participativas. Para que este modelo sea sostenible, es necesario descentralizar el trabajo, así como la creación de conocimientos, la memoria y la documentación del proceso de concesión de subvenciones participativas de FRIDA. Esto permitiría que las transiciones de personal se produjeran con mayor facilidad, y ayudaría a que el modelo de concesión de subvenciones fuera más sostenible a largo plazo y estuviera más abierto a nuevos cambios y al crecimiento. Además, FRIDA reflexionará sobre cómo el modelo de financiación plus puede verse y evolucionar de manera que sea sostenible y responda a las necesidades urgentes, pero que siga centrado en soñar, practicar y elaborar estrategias de futuro feministas.

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